top of page
  • Writer's pictureGlow

¡CÁLLATE, C@Ñ@!

Puede que tenga cáncer de tiroide, lo que en retrospectiva es el tipo de cáncer más pendejito, pero sigue siendo bastante estresante.He estado lidiando con esto durante un par de meses, pero no he querido hablar de ello.Por lo cual siento que mis últimas publicaciones no han sido tan buenas. Además del hecho de que estoy algo aterrada de que la generación Z me cancele (como si hubiera algo que cancelar en este momento), he estado sintiendo muchas emociones fuertes y radicales, que sé que en el futuro voy a lamentarme de haberlas expresado ahora. Dicho esto, después de la semana que acababa de tener ... voy a elegir la violencia. Comencemos.


Quiero empezar agradeciendo a mi cirujano. Sí, tuve una cirugía … Siento que esa no es la redacción adecuada. Así que comencemos de nuevo. Sí, se suponía que me operarían y extirparían mi tiroide terrorista. Pero, por desgracia, debido a mi condición y a mi cuello fusionado, no podía intubarme. Por lo tanto, no se hizo el procedimiento. Es muy común que las personas con AME (atrofia muscular espinal (…si para este punto aún no lo sabías, bueno, esperemos que seas nuevo/nueva aquí), nos estresemos por las cirugías más pequeñas debido a nuestras complicaciones respiratorias. Pero volvamos al cirujano. Quiero agradecerle porque tuvo el coraje de detener el procedimiento antes de que la mierda llegara al ventilador. Si no entiendes por qué eso es tan importante, bueno, hubo mucha presión sobre él. Y según mis experiencias, a pesar de que son nuestros héroes anónimos, ellos (los profesionales médicos) tienen un EGO JODIDAMENTE ENORME, que él logró dejar de lado y probablemente estoy viva por eso. Así que gracias.

Estoy inmensamente agradecida de que hayas escuchado y valorado lo que yo tenía que decir de antemano. Podrías haber hecho la traqueotomía en el acto, pero sabías que yo quería tomar esa decisión, y lo respetaste. Estoy llorando mientras hablamos. Habiendo dicho esto, esta publicación no se trata de eso, sino que trata de esos PERROS charlatanes que no escuchan.

Como dije, elijo la violencia. No voy a ir tras las personas en la sala de cirugía que intentaron torcer mi cuello suavemente, incluso después de que les dije más de una vez que estaba FUSIONADO, porque como dije antes, están bajo mucha presión. Me inclino hacia que fue un reflejo tipo: “Tengo una presentación importante, así que necesito mis anteojos… ¿dónde están mis anteojos?”, mientras los llevas puestos. En su lugar, decidí aprovechar esta nueva oportunidad de la vida (¿Estoy siendo dramática? Supongo que nunca lo sabremos), para volver a ser, en mi vida diaria, una perra insufrible y regia con los pies bien puestos sobre la tierra.


Sé que la mayoría de ustedes no se ha dado cuenta, pero he estado perdiendo mi agudeza desde que me mudé a la isla. No culpo a mi gente, solo me culpo a mí misma por caer en la mentalidad de "Yo digo las cosas como son". Siempre hay algún saquito de mierda (quería usar algo sin género para ser justa) que abiertamente se describe a sí mismo como cruelmente honesto. Lo considero una nueva señal de alarma. Este tipo de persona, por lo general, dirían que maldigo demasiado para mi imagen, razón por la cual he estado cuestionando mis palabras. También podrían devaluar mis luchas como mujer discapacitada solo porque mis padres son financieramente estables. Por alguna razón, he dejado que este tipo de personas me afecten y dejé de ser yo misma. Así que esto es lo que tengo que decir.


¿¡Qué coño significa eso!? ¿Cuál es, exactamente, mi imagen? ¿Es esa tu forma sexista y discriminatoria de decir que soy una mujer discapacitada? Porque la última vez que me fijé, Bad Bunny estaba en la portada de The Rolling Stones, y no es Lord Byron... bueno, contenido similar, vocabulario diferente. Independientemente, nadie le ha estado echando mierda por maldecir. ¿Por qué? Debido a que es un rapero masculino sin discapacidad, y se espera de su arquetipo que maldiga. Por lo tanto, la gente se come su mierda. (Esto no tiene nada que ver con Bad Bunny, en realidad me gusta Bad Bunny, así que no me ataques).


En el interín, por alguna razón, la gente está teniendo dificultades para entender a una mujer discapacitada de 24 años (no olvidé mi edad, escribí esto antas de mi cumpleaños) con actitud. Esto se debe a que LAS. PERSONAS. NO. ME. ESCUCHAN. CUANDO. YO. LES. HABLO. Así que deja de proyectar sobre mí ese maldito estigma de una mujer discapacitada sin esperanza, de un ángel caído, antes de que abra la boca. Odio decírtelo, pero no soy tan maravillosa, y podría tener muy mal humor. O probablemente soy increíble. Descúbrelo por ti mismo. Y aquí hay otra opción, SI NO TE GUSTA LO QUE ESCUCHAS, DESPUÉS DE ESCUCHARLO PUEDES DECIDIR QUE NO TE GUSTO, Y GUARDARLO PARA TI. Siento que últimamente esto se está convirtiendo en un concepto extraño. "Pero Glow, te estás quejando de la gente", podrías estar pensando. "¿No es eso hipócrita?" ¿Me ves usando algún nombre o destruyendo sus vidas por algo que no me gustó? No. ¡Así que cállate, c@ñ@ y ponte el bozal!


Ahora, estoy a punto de revelar información que podría hacerme menos popular entre las generaciones más jóvenes. Soy privilegiada, soy una latina blanca y mis padres son económicamente estables. No tienen dinero de yate, pero basándote en mi estado médico, puedes deducir cuán financieramente estables son. ¿Qué significa eso? Desafortunadamente, en los Estados Unidos ser discapacitado es costoso y yo estoy MUY consciente de eso. Cuantos más impedimentos tengas, más tendrás que pagar para tener una vida sustancial que esté a la altura de las expectativas sociales. La mayoría de los influencers o defensores discapacitados que tú ves reciben ayuda financiera de algún lado. Así que, a pesar de que lucimos nuestra discapacidad como si acabara de salir de la pasarela, espero que sea la última maldita vez que alguna persona capacitada disminuya nuestras luchas como mujeres impedidas, solo porque no somos completamente independientes financieramente en este momento. Entonces, si decidimos tomar una copa en un bar caro para darnos un capricho, y una persona sin discapacidad decide avergonzarnos por ello, creo que tenemos derecho a decirles que se vaya para la mismísima mierda (en las famosas palabras de Bad Bunny, "dile al diablo que te envíe el pin"). Principalmente porque esta vergüenza ocurrió después de decirle que no me importa pagar un poco más por la accesibilidad en un entorno muy poco accesible (busca Viejo San Juan y lo entenderás). Y, sin embargo, eligió NO ESCUCHAR LO QUE ESTABA DICIENDO y competir para estar más woke minimizando mi situación. Cuando en realidad no había ninguna competencia en primer lugar. Lo gracioso es que cuando me entero que mis amistades viajan múltiples veces en un corto periodo de tiempo, no cuestiono sus gastos al igual que no cuestiono cuánto cuestan unas orejitas de Mickey en Disney World… hipotéticamente, claro. Entonces, ¿qué tan alto tiene que ser ese pedestal para cagarte directamente en mi fiesta? Fíjate, no estoy usando nombres. Dicho esto, en situaciones como estas me siento marginalizada e ignorada y usualmente prefiero no decir nada de lo que luego me pueda arrepentir. ¡Pero ese paraíso de algodón de azúcar se acaba ahora!


A partir de estos momentos, vuelvo a decir lo que me dé la gana, como me dé la gana. Eso no chocará con la mentalidad de “decir las cosas como son”, porque no tengo la osadía de pretender saber “cómo son” las cosas en realidad. Es decir, en mi mente siempre existe la posibilidad de estar equivocada. Comparto mi perspectiva y mi opinión, y cuando la multitud aprenda a escuchar, puede sentirse libre de formarse una opinión constructiva propia. Hasta entonces, estaré aquí sin dar por sentado mi privilegio, persiguiendo una carrera que realmente ayude a la gente, porque aprenderé a escuchar.

Y eso, amigos míos, es lo que el mundo necesita en este momento: ¡gente que esté dispuesta a CALLARSE, C@Ñ@ y escuchar!


42 views0 comments

Recent Posts

See All
bottom of page